Mi padre perdió sus dos brazos a consecuencia de jugar en los arboles y a la negligencia medica de su época. Esa no fue causa de que lograra edificar una gran familia y un status económico que muchos envidiaban, su olfato para predecir donde sembrar y que sembrar hizo que todos lo respetaran y fuera como un guru de la agricultura, todos le pedían consejos y fue en su época alguien que se gano a pulso el sufijo de Don.
Yo no lo recuerdo así, para mi era alguien que era muy estricto con las cosas que hacías, le gustaba la perfección, y las cosas que hoy hago correctamente se basan en sus enseñanzas, lo recuerdo siempre enseñando, siempre diciéndote como hacer las cosas, que hacer, como ser alguien mejor o ser mejor que los demás, siempre un paso adelante antes de que sucediera algo, !levanta eso que te puedes tropezar!, !amarra eso que puede suceder un accidente! etc etc y etc.
No tuve palabras amorosas pero tuve palabras de aliento y sonrisas por haber hecho algo bien y que significaron todo para mi, y que hicieron que en mi vida supiera valorar las cosas buenas que hacían los que una vez tuve bajo mi mando.
Un abrazo bien fuerte a ese hombre que hizo de mi lo que soy y que me permitió trasmitir esas enseñanzas a mi descendencia.
Gracias papá, ´muchas gracias por haberme hecho un buen hombre.
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