lunes, 30 de noviembre de 2020

Abandono.

 

     Hoy surgió una pregunta en mi interior. ¿Se puede abandonar todo lo que has conseguido, se pueden dejar atrás lo que has construido a través de los años, se pueden abandonar las costumbres adquiridas y todo a lo que uno esta acostumbrado?
     Es una pregunta tonta, y muchos dirán que no es posible, que ninguna persona en su sano juicio haría eso, y tal vez aleguen que lo que se consigue con tanto esfuerzo no se deja tan fácilmente y que las raíces del árbol que se ha sembrado es lo que mantiene unido al lugar y lo que lo rodea; otros también dirán que el modo vivir a lo que uno esta acostumbrado es motivo para continuar igual, el modo de vestir, de comer, de sentirse cómodo, de sentirse apreciado, obligado con los que te rodean, sentirse responsable de que el barco navegue sin novedad.
     Aunque tal vez exista un numero igual de opiniones en contra que dirán que mas que amor por seguir siendo parte de algo que se ha construido es la costumbre y estar en una zona de confort, y que es necesario darle a lo que resta de vida un giro inesperado y hacer las locuras que han estado reprimidas, tener una vez mas la libertad que uno cree tener pero que sin embargo tal vez ya se encuentre perdida y solamente se encuentre disfrazada de rutina.
     Así como a mi me surgió esa pregunta, cuantos se las estarán haciendo y mas que nada, de que lado de la balanza se encuentran y lo que mas importa es: ¿Tomaran la decisión correcta, la mas fácil, o la mas difícil, la que los haga feliz, o la que los haga infeliz? ¿Y tu que harías?. 
     




jueves, 26 de noviembre de 2020

¿Amor o deseo?

     En la vida siempre confundimos el amor y el deseo, son tan parecidos que no distinguimos una cosa de otra, pero en realidad son cosas muy diferentes. pero que se pueden confundir porque la ocasión en que sentimos esos sentimientos son las mismas. Cuando sentimos amor por alguien siempre esta implícito lo que vemos en esa persona, desde como se viste hasta como tiene las uñas de las manos, desde como habla hasta como expresa sus ideas y es ahi cuando también vemos e imaginamos lo que seria de nosotros estando con el, por eso muchas veces nos confundimos porque no sabemos lo que en realidad queremos ¿Es el envase o lo que trae adentro?

     El deseo es pasajero y se termina cuando obtenemos lo que deseamos, en cambio el amor es como una droga de la que queremos siempre mas, el deseo es como cuando de niños queremos un juguete y cuando nos lo compran lo disfrutamos pero al poco tiempo queda arrumbado junto con los demás, en cambio el amor es como cuando tenemos el juguete que elegimos y cuando lo tenemos cada día que pasa le encontramos nuevas cualidades y nos encariñamos mas y mas hasta que llega a ser imprescindible y ya no nos importan los demás, y aunque pase el tiempo siempre nos sentiremos a gusto con su compañía.

     Amar no es solo mirar, es ver con el corazon, desear es solo sentir emoción por lo que no tenemos.

     

     

     

      
 

miércoles, 25 de noviembre de 2020

Adios.

     Cuando llega el momento de decir adiós, es tan doloroso que sentimos que una parte de nosotros también se va con ese ser querido, y es verdad, porque la mitad de lo que somos es la pareja que tenemos y que siempre hemos tenido, decirle adiós es saber que ya no estará con nosotros para decirnos lo que no queremos escuchar, y al mismo tiempo lo que nos gusta escuchar, es saber que lo que no nos gustaba de ella ahora lo añoramos, es comprender que lo que nos mantiene en pie no es nuestra fortaleza sino lo que aprendimos a soportar estando a su lado, es entender por fin que no hace falta tener una solvencia económica para ser feliz si contamos con la presencia de quien a estado a nuestro lado en las peores condiciones, ahi donde otros nos abandonaron pero sin embargo ella se mantuvo firme y nos brindo su apoyo, e incondicionalmente fue la pareja que habíamos soñado.

     El vacío que queda jamás va a ser reemplazado con nada, porque a través del tiempo ese vinculo que se ha formado es tan fuerte y tan solido que no puede compararse con nada.

     Pero el consuelo que nos queda y que siempre tendremos presente, es que hemos hecho lo que estuvo en nuestras posibilidades porque fuera feliz, porque durante el tiempo que estuvimos juntos, será la vida que siempre soñamos y que hasta el ultimo momento fuimos felices.

     Ahora que decimos adiós, solamente es momentáneo, creo que existe una segunda oportunidad para continuar lo que queda pendiente, simplemente es un hasta luego, un hasta pronto, la vida continua, pero nunca será igual, sencillamente será diferente porque ella ya no estará aquí. 

     

      
 





martes, 24 de noviembre de 2020

Alla en el rancho (segunda parte).


      Creo que mis primos son el pilar de mis recuerdos, los tengo tan presente en todo momento que creo que mi vida de niño no fuera nada sin ellos, con el sentido de la amistad, de compañerismo, de sentimientos tan diversos, de travesuras, de amores secretos, de complicidad, de unión, y que no se pueden explicar con palabras.

     Hoy que la tecnología nos acerca, quiero decirles cuanto los extraño, cuanto añoro estar cerca para poder recordar juntos un sin fin de anécdotas, y sentir nuevamente la calidez de su compañía, pensar en los que ya no están con nosotros, que se han ido, pero permanecen en nuestra memoria y están tan presentes como cuando jugábamos juntos.

     Siento la nostalgia de un ayer que nos unió mas que como familia, como compañeros y amigos, siento un nudo en la garganta de recordar todos esos momentos juntos, que para mi significan toda una vida, porque lo que pasamos, vivimos y sentimos no cabrían en un libro, ni tampoco podrían escribirse los sentimientos que experimentamos.

     Somos afortunados por tener todos esos recuerdos, y por experimentar todavía esa sensación de libertad que nos caracterizaba, porque podíamos ir a donde quisiéramos con solo pensar en ello, con solo imaginarlo podíamos reencarnar a nuestros ídolos favoritos que veíamos en las carpas de los cines ambulantes que nos visitaban.

     Y que contar de nuestros romances imaginarios, porque siempre llevamos a cabo el dicho aquel que dice  "A la prima, se le arrima", y fuimos tan felices imaginando un mundo para nosotros, haciendo que todo fuera mas llevadero, desde las labores del campo hasta la escuela.

     ¡Ah que tiempos aquellos! Cuando nuestros padres nos ayudaban para hacer nuestros papalotes, nuestros trompos, nuestros tiradores, comprarnos canicas, porque siendo felices los hacíamos felices a ellos con la constante competencia de quien era el mejor.

     Ahora solo nos quedan los recuerdos, pero esos son tan importantes porque nos mantienen vivos y cuando los recordamos, volvemos a estar ahi, posando para la foto y después seguir jugando.

       

     




sábado, 21 de noviembre de 2020

Recuerdos.


 

     Parece que fue ayer, en que la vida era normal, libre de preocupaciones, solamente vivir diariamente lo que ya estaba previsto, estabamos tan bien y no lo sabíamos, éramos felices con cosas pequeñas y no lo disfrutábamos, sentíamos que la vida era aburrida porque solamente era rutina, sin imaginar que después de la calma venia una tormenta peor.

     Hoy que todo es diferente, que los recuerdos nos parecen hermosos y el presente no es lo que imaginábamos, y es solamente sobrevivir, y seguir viviendo mientras nos cuidamos, tanto que parece una exageración y una cosa de película, pero es la vida real, es la vida cotidiana y pareciera que vivimos y somos personajes de una serie de terror y de misterio.

     Aun así, surgen historias de amor, de reencuentros, y la vida continua, y nos adaptamos a lo que tenemos en el presente, dejamos atrás el sufrimiento, los pesares, los malos momentos y un sin fin de recuerdos que nos hacen daño y que queremos olvidarlos.

     Y pensamos que todo es un sueño o tal vez una pesadilla, todo depende de lo que nos toque, cuando todo va bien y no tenemos de que preocuparnos sencillamente somos felices, si hay que llorar tendremos que hacerlo, y tendremos que aceptar que nos toco perder.

     Si aun así nos toco ser feliz aun con las tragedias de los demás, debemos de aceptar con gusto que somos bendecidos porque a pesar de todo lo que esta mal nosotros tenemos la satisfacción de ser felices porque Dios nos ha bendecido con la mejor de las suertes.





viernes, 20 de noviembre de 2020

Destino.


         Cuando llegamos al sexto piso de nuestra existencia y observamos lo que el destino a traído a nuestra vida, sentimos ese cosquilleo de pensar que habría sido de nuestra vida si hubiéramos tomado decisiones diferentes a las que tomamos en el momento adecuado que cambio por completo lo que ha hecho de que seamos lo que somos en la actualidad.

     Llega un momento en nuestra vida en la que tocamos fondo, y nos damos cuenta de que todo ha sido un simulacro, de que siempre hemos tratado de engañarnos a nosotros mismos, imaginando que hacemos lo correcto solamente porque los demás nos dan el visto bueno y sentimos que nuestra imagen es lo que corresponde a una persona con buenos principios y es lo que tratamos a toda costa de que todos se imaginen de que lo somos.

     Pero ahora que ha pasado el tiempo y estamos cansados de fingir lo que no sentimos, y que queremos ser lo que traemos escondido en nuestro interior, de decirle al vecino que nos molesta que se ocupe de sus asuntos y no de los nuestros, de levantarnos tarde y saborear esa taza de café, sentamos a leer un libro mientras vemos nuestras mascotas, de regar nuestras plantas y hablarles para que crescan mas rapido, o simplemente no hacer lo que hacemos a diario, lo que hemos hecho durante tanto tiempo y que es la rutina que nos desgasta y que poco a poco nos va llevando al conformismo, tal vez sea tiempo de agarrar las llaves del carro y alejarse de todo y de todos o simplemente hacer lo que nos de la gana, y mas que nada ser feliz.

     El destino nos ha puesto donde estamos y también nuestras decisiones, es tiempo de hacer lo que hemos soñado, porque el tiempo es lo que menos tenemos, el tiempo es ahora lo mas valioso que tenemos, ya no hay que darle tiempo al tiempo, sino que debemos ganarle tiempo al tiempo haciendo lo que hemos soñado, lo que hemos anhelado y siempre hemos deseado.

     

      






jueves, 19 de noviembre de 2020

60 y 20.


      Cuando hemos visto pasar el tiempo, atrapado en los recuerdos, en los sueños de juventud y en los castillos que una vez construimos, tenemos la necesidad de hacer un balance de lo que deseábamos y de lo que ahora tenemos, y llegamos a la conclusión de que tal vez solo tenemos una parte de lo que deseábamos y seguimos esperando lo que complementa nuestra vida para ser completamente feliz.

     Sin embargo si la vida nos diera la oportunidad de enfrentar nuestro pasado y de pronto tuviéramos enfrente lo que nosotros pensamos que es lo que siempre hemos soñado pero con 40 años de diferencia, si de pronto pudiéramos decir lo que nunca dijimos, de enmendar los malos entendidos, de complementar las frases que quedaron inconclusas, las caricias y los besos que no se dieron, nos atreveriamos a rectificar nuestros errores o solamente quisiéramos aprovechar la oportunidad decir una y otra vez que nosotros no somos los culpables de lo que ha sucedido y sentirnos igual de desdichados.

     La otra opción es hacer lo que siempre hemos pensado deberíamos haber hecho, locuras, hacer lo que no hicimos, disfrutar el momento, realizar mientras se pueda esos sueños que siempre hemos tenido y llevar a cabo esa caminata tomados de la mano, esa platica a la luz de la farola de la esquina mientras los vendedores ambulantes interrumpen con sus gritos o escuchar la canción que nos identifica mientras saboreamos un café y decirle al que esta cantando que la persona que esta junto a nosotros es el amor de nuestra vida, o simplemente tomarse de las manos mientras las miradas dicen lo que nunca se había dicho con palabras.

     Soñar, con que nuestros sueños se cumplen, siempre será eso, un sueño, pero si alguna vez se nos cumple debemos de hacer lo inesperado y mas que nada disfrutarlo, porque eso nunca pasa y nunca pasara y lo que sucedió hace 40 años tal vez se quede ahi, atrapado en el tiempo, atrapado en los recuerdos, escondido en nuestra memoria y burlándose de nosotros.

     60 y 20, solamente son 40 años de estar pensando y de estar soñando con un reencuentro y con un milagro.

      

viernes, 6 de noviembre de 2020

Emoción.

     Nuestra vida esta llena de emociones, por eso sentimos que vale la pena, porque diariamente es un constante sentir que todo es diferente, que no podemos imaginar lo que el destino nos depara a cada paso que damos, o lo que vendra despues de un dia dificil, o de un dia cualquiera. La emoción de vivir es como una ruleta rusa, y nuestras acciones son el detonador para que suceda lo que tiene que suceder, algo bueno, una esperanza o el final de nuestros sueños, aun asi con gusto apretamos el gatillo y despertamos cada día con la esperanza de que todo sea mejor que el dia anterior.

     Pero la emoción de que nuestros sueños se cumplan nos da un cierto temor, porque lo que hemos imaginado es solo un deseo de lo que queremos, de lo que siempre hemos querido y de lo que vamos a querer siempre. Pero sentir que de pronto se haga realidad, es la emoción mas grande que podemos sentir, y seguimos soñando, pensando y tratando de que lo que hemos imaginado de pronto no solo sea un sueño, y es tan complicado que los sueños se vuelvan realidad, no porque no lo deseemos sino porque no estamos preparados para sentir lo que nunca habíamos sentido.

     Se necesita mucho valor para enfrentar las consecuencias de las decisiones que podamos tomar para llevar a cabo lo que suceda si nuestros sueños están por realizarse, y para seguir siendo lo que hemos sido siempre, para seguir manteniendo los valores que tenemos, y para ser feliz con las consecuencias que haya con lo que hemos decidido.

     La emoción es un sentimiento que nos cambia la vida y el modo en que la vemos y la hemos visto y la hemos vivido, es como si de pronto todo cambiára y fuéramos capaz de modificar nuestra opinión y ver nuevamente que todo ha cambiado.

      Entonces la emoción de un sueño que se vuelve realidad, es como abrir el regalo navideño y ver que lo que queríamos es lo que acabamos de encontrar.