Recuerdos.

      Los recuerdos llegan a ser para nosotros como el oasis de nuestra vida, porque nos devuelven un poco de lo que creemos perdido, de lo que ha quedado atrás cuando transitamos por los laberintos de nuestra existencia, y llegan a ser tan necesarios para seguir adelante como si fuera el aire que respiramos.

     Y vamos recorriendo nuevamente a través del pensamiento, todo eso que nos llena de orgullo, todo eso que forma parte de lo que hemos construido, que es el fruto de nuestro esfuerzo de tantos años, de toda una vida, una que ha pasado frente a nosotros sin que nos diéramos cuenta, porque hemos estado distraídos queriendo alcanzar nuestros sueños, queriendo llegar a la meta que solía ser inalcanzable, queriendo ser feliz sin lograrlo porque cada vez nos hace falta algo.

     Los recuerdos debemos compartirlos, porque cuando lo hacemos damos un poco de nosotros mismos, como un obsequio de lo mucho que guardamos, de todo ese caudal de vivencias que todavía están a nuestro alcance como regalo que hemos conquistado.

     La vida nos premia por nuestros esfuerzos, debemos de agradecer eso.