Soñar, a veces es vivir otras vidas, es imaginar que somos quien nunca hemos sido y hacer lo que nunca hemos hecho. Y despertamos sudorosos por la emoción, o con lágrimas en los ojos, tal vez sonrientes aunque en realidad no sepamos a ciencia cierta porque estamos asi.
Unicamente quien mas sabe de nosotros es nuestra almohada, ella es la confidente de nuestras desdichas, de nuestras alegrías, de nuestros triunfos, y cada noche después de lo que hemos vivido, le decimos con toda la sinceridad lo que a nadie le podemos decir, todo lo que nuestro corazón experimenta, nadie mas que ella sabe lo que sentimos, lo que añoramos, lo que nos acongoja y lo que mas nos alegra, es como la confidente perfecta para albergar nuestros secretos.
Nuestra almohada siempre será ese refugio que buscamos diariamente para depositar nuestros sentimientos, y los sueños que a nadie se lo podemos contar, eso que esta tan escondido y que nadie sabe mas que ella, y que sabemos con certeza que nadie mas que ella lo sabra.
La almohada siempre será una pieza esencial para descansar, no importa si solo sea material, nos dará descanso y comodidad para dormir. Solamente quienes estamos en otro nivel lo usaremos para depositar nuestros sueños, esos que nos agobian noche a noche y que queremos que se hagan realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario