Pero la verdad es que muchísimos mas piensan que la noche es para divertirse, para gozar y destramparse, y hacer con la complicidad de ella todo eso que no podemos hacer a la claridad del día, y hacemos de ella nuestra cómplice para desatar nuestros obscuros deseos.
Aunque unos pocos también sienten que la noche es propensa para traer enfermedades y malas noticias, y en la obscuridad corremos para resolver los problemas, y nos vemos tocando en una farmacia, preguntando en una comisaria de policías o en una institución de salud, todo eso acompañados por el titilar de las estrellas y la claridad de la luna.
La noche es tan impredecible que a veces nos da miedo que llegue, tal vez por los recuerdos que tenemos, o porque simplemente la obscuridad nos causa temor y lo asociamos con la soledad, con la ausencia de colores, de formas y de sonidos.
Y aunque estemos en nuestra cama, sabemos que la noche traerá los sueños que no queremos, las pesadillas que nos agobian, o simplemente no podremos dormir pensando en los problemas que están pendientes y que de seguro nos quitaran el sueño, tal vez sean nuestras desgracias económicas, las malas decisiones amorosas que tomamos, o esa enfermedad que nos aqueja.
El insomnio es compañera de la noche, pero existe la esperanza de un nuevo amanecer y que hace que sobrevivamos y nos sintamos con las energías suficientes para empezar de nuevo sin importar lo que haya sucedido ayer, con ese pensamiento en nuestra mente hace que conciliemos el sueño y que hagamos de la noche un espacio de descanso y recobremos la fuerza para empezar un nuevo día.
Debemos estar en paz con nuestra conciencia y con lo que hemos sembrado, solo así tendremos la paz para disfrutar de un merecido descanso durante la noche que se avecina.
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